Hay veces en la vida que te encuentras con lugares llenos de encanto donde menos te lo esperas… increíblemente a veces no es necesario irte a miles de kilómetros de tu casa para encontrar milagros. Y eso es lo que se puede encontrar en el Easy Horse Care Rescue Centre, un lugar, donde dos personas, sin ayuda de nadie, comenzaron un proyecto de lo más hermoso y altruista que hemos visto jamás. Un lugar donde se rescata, literalmente, a caballos que han sido maltratados, abandonados y incluso en algunos casos, que se ha intentado asesinar vil mente. Afortunadamente existen personas maravillosas como Sue Weeding (fundadora de Easy Horse Care Rescue Centre) y su marido.
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¿Cómo llegar?
LLlegar es bastante sencillo. Se puede hacer por la autovía AP-7 saliendo por la CV-91 dirección Guardamar del Segura. Una vez allí, en la localidad de Rojales, lo mejor es conectar el GPS para llegar, porque esta por caminos comarcales con poca o ninguna señalización.
Un sitio que todo niño debería visitar
A menudo nos llevamos a nuestros hijos a centros comerciales, a parques de atracciones, donde todo lo que ven es artificial y les inculcamos valores consumistas y poco enriquecedores. No está de más, que de vez en cuando nos acerquemos a conocer sitios como Easy Horse Care Rescue Centre donde sin ningún tipo de beneficio ni ánimo de lucro se trabaja por el bienestar de animales que han sido maltratados por culpa de la mala cabeza de algunos “animales” (por llamarles de alguna manera).
En lugares como estos, es importante que nuestros hijos aprendan, que una mascota, un poni (que no hay niña que no haya querido tener un poni) es un ser vivo, que tiene muchas necesidades y que conlleva una gran responsabilidad. Que no es un animal juguete, que cuando ya te canses de él lo puedes tirar a la basura. De Hecho, de la mano de Clara, nuestra guía hispano hablante, pudimos conocer la historia de docenas de caballos miniatura, animales que hace años se pusieron de moda, pues cualquiera podía tener un “mini caballo” en su finca, como si se tratase de un perro, pero que al llegar la crisis y no tener dinero para mantenerlos fueron abandonados.
Historias increíbles que nos llegan al corazón.
Durante nuestra visita, hemos conocido a caballos increíbles. Como Harry Trotter, un caballo nacido en el mismo Easy Horse Care Rescue Centre que un buen día salto la valla donde se encontraba para hacerse amigo de otro caballo, que había sido golpeado en la cabeza hasta casi morir, y asi cuidarle y ayudarle en su recuperación. Es increíble, como animales, que nosotros pensamos que no piensan, deciden ellos mismos apoyar a otro de sus congéneres en su recuperación.
Como esta, teneis un monton de historias para descubrir de la mano de las visitas guiadas que se ofrecen a diario. En nuestro idioma, Español, los domingos, eso si, por motivos de Covid-19 debeis hacer la reserva desde la web de la empresa… ¡Ah, y lo mas importante! Para poder acceder debéis hacer un donativo de 10 euros por adulto y 5 por niño. Puede parecer caro, pero ese dinero va integro a mejorar la vida de los caballos. ¡Así que ya sabéis! Aportar vuestro granito de arena, que es muy necesario.
No solo de caballos vive Easy Horse Care Rescue Centre
Y así es… Uno de los animales más pintorescos del grupo es Christmas. Una oca, la mar de simpática que apareció un buen de navidad en el centro. De ahí viene su nombre, del día en que apareció y decidido quedarse a vivir con los caballos. Y es que esta es la esencia de Easy Horse Care Rescue Centre, “todo animal es bienvenido”. En sus instalaciones podremos encontrar muchos más animales, no solo caballos, aunque el lugar se basa en rescatar a equinos abandonados o maltratados.
La historia de Rupert
Si te parece que la película de “Babe, el cerdito valiente” esta guay, debes conocer a Rupert, el verdadero cerdito valiente, que se escapó de una muerte segura en un matadero cercano y apareció un buen día en la puerta de Easy Horse Care Rescue Centre. El pequeño lechón decidió auto salvarse así mismo.
No tardaron mucho en aparecer por allí buscándolo y cuando uno de los voluntarios del centro se enteró de cuál iba a ser el futuro del pequeño, decidió comprarlo por 300 euros y dejarlo vivir en el centro. En la actualidad Rupert ha crecido, y con solo 2 años, es más grande que el sofá de nuestra casa. No obstante, todo lo que tiene de grande lo tiene de bonachón y es súper simpático. Además, le encanta chapotear en el barro y jugar con una pelota. Se ha hecho tan famoso a través de redes sociales, que el año pasado le mandaron una piscina de regalo. Sin duda, Rupert, es todo un crack.
Unos comienzos muy difíciles.
Si bien es cierto que el lugar ha ido ganando con los años, es desde hace poco que tanto la policía de las localidades vecinas, como el ayuntamiento de Rojales (con aportaciones económicas), han decidido apoyar el trabajo de Sue Weeding y su marido. Hasta entonces, esta pareja de defensores de los equinos han tenido que soportar carros y carretas. Las mismas personas que sometían a los animales a lo que se puede considerar torturas, acudían por la noche al centro a romper las vallas, atar a los caballos, etc para vengarse de los dueños tras producirse algún rescate. Así que ya veis… hay “animales” más animales que los equinos, que solo saben destruir.
Afortunadamente el sitio hoy en dia cuenta con un muro infranqueable, cámaras de seguridad y esto es una prueba más de que a la larga, las buenas personas acaban triunfando sobre el mal y consiguiendo una vida mejor para los animales.
Hay sitio para los que quieren ayudar
Easy Horse Care Rescue Centre no es solo un sitio donde pasear y conocer el trabajo que se hace para mejorar los últimos años de vida de estos animales, también es un lugar donde puedes acudir a trabajar como voluntario y hacer algo por los animales, además de tener una experiencia enriquecedora. La lástima es que hay que ser mayores de 18 años para poder colaborar como voluntarios, si no, Alejandro y Irene habrían pasado allí unos cuantos días echando una mano.
Consejos
Si decidís visitar el sitio ahora en Verano, recordad que las visitas son de 12:00 a 14:00, por lo tanto son horas de máximo calor. Es imprescindible llevar gorras y por lo menos 1 litro de agua por persona. Nosotros llevamos dos y nos los fundimos enteros.
No olvides reservar por la web la visita o bien llamar para preguntar. La visita en castellano es solo los domingos. Podéis hacerla en ingles, que tampoco esta mal para practicar, jajajaja.